La fobia que atormenta a Johnny Depp le ha puesto diferentes desafíos en su vida laboral; sin embargo, el actor ha sabido enfrentarlos, llegando a protagonizar personajes similares a su miedo más grande.
Según MedlinePlus, las fobias son trastornos de ansiedad que surgen al sentir un peligro o miedo excesivo a objetos o situaciones. Aunque la causa principal de las fobias es desconocida, algunas suelen ser hereditarias.
Para Johnny Depp padecer una fobia le ha puesto diferentes desafíos en su vida laboral, pues en una industria como lo es el cine, estar dispuesto a adaptarse a cualquier escenario es esencial y tener un trastorno como ese puede ser un limitante para él.
¿Cuál es la fobia que padece Johnny Depp?
El famoso actor de Hollywood hizo pública su coulrofobia, que supone un miedo intenso e irracional a los payasos. Está catalogada como una de las fobias más comunes junto a la aracnofobia, la claustrofobia, la hematofobia, entre otras más, según Ivane Salud, clínica especializada en la salud mental.
En palabras del actor: “No sé si es por la cara pintada o por la falsa sonrisa. Son espeluznantes. Siempre parecen estar al acecho, como si debajo de esa apariencia se escondiera un demonio”.
A pesar de padecer dicho trastorno, Johnny Depp lo enfrenta a diario e inclusive ha protagonizado personajes con aspectos similares a los de un payaso para disminuir el temor y ansiedad hacia ellos. Es el caso del ‘Sombrerero Loco’ en la producción de ‘Alicia en el país de las maravillas’.
En esa oportunidad, Depp tuvo que enfrentarse a lucir como un payaso para el personaje asignado, pues su vestuario, maquillaje y personalidad lo hacían lucir como una persona muy entusiasmada por la felicidad de los otros.
Como el actor, la mayoría de personas que padecen de coulrofobia desencadenan ese miedo irracional por las características físicas que poseen los payasos, como sus ojos y boca grandes y gestos exagerados, que muchas veces hacen alusión a una falsa emoción de felicidad.
En su mayoría, las fobias pueden ser tratadas para lograr disminuirlas e inclusive acabarlas. Dichos tratamientos pueden ir desde asistir a un psicólogo o psicoterapeuta hasta la toma de medicamentos.